domingo, 29 de octubre de 2017

DBSNL // Capítulo 13: Ki divino

DBSNL // Capítulo 13: Ki divino
“¿Crees que es casualidad que Son Goku siempre vaya un paso por delante?”


En el planeta de Beerus, Goku y Vegeta se preparan para comenzar su entrenamiento con Whis.

- “Voy a echarme una siesta” – dice Beerus mientras se retira a su palacio.  – “Ni se os ocurra despertarme”.

Whis ignora al Dios y prosigue con su charla.

- “Para tener acceso al ki divino es importante tener el corazón y la mente en calma.” – explica Whis. – “Es fundamental tener un control absoluto del ki”.
- “¿Cuándo empezamos?” – pregunta Son Goku, algo impaciente.

Whis le mira con con gesto de desaprobación, porque no le gusta ser interrumpido, pero continúa.

- “Todo ser vivo tiene su propio ki. Algunos seres tienen una gran cantidad de ki, como vosotros; y otros no. Eso depende de su raza y, por supuesto, de su entrenamiento individual.” – explica el ángel. – “El ki divino, en cambio, es algo que pertenece a todos los seres del universo.”
- “¿Cualquiera puede usar ese ki?” – se sorprende Son Goku.
- “No es tan sencillo.” – responde Whis. – “Como ya os he dicho, el primer paso es obtener un control absoluto de tu propio ki”.
- “Eso lo tenemos superado” – dice Goku. – “¿Cuál es el siguiente paso?”
- “Son Goku, ya debiste notar que el ki que usaste en tu enfrentamiento con el señor Beerus tenía unas características distintas al tuyo propio”.
- “Así es, se sentía más denso y pesado...” – reflexiona Son Goku.
- “¿Qué hay que hacer para acceder a ese ki?” – pregunta impaciente Vegeta.
- “Son Goku fue capaz de usar el Kaioken porque la cantidad de ki no era distinta a la de su cuerpo habitual, pues el recipiente era el mismo. Pero es un ki más puro, así que ofrece un mayor rendimiento.” – le explica Whis.
- “Un ki más puro...” – repite pensativo Goku.
- “Lo primero que debéis hacer es meditar, buscar la paz interior, calma de mente y espíritu, y ser capaces de vaciar vuestro ki mortal al máximo.” – continua Whis.

En la Kame House, el maestro Mutenroshi ha invitado a cenar a Goten.

- “¿Y se quedó sin cenar?” – pregunta Goten riéndose.
- “¡Así es! Y todo porque Krilin hizo trampas” – le cuenta el maestro, mientras ambos ríen.

Goten se termina el refresco de un tirón.

- “¡Muchas gracias! Estaba todo muy bueno.” – dice Goten antes de levantarse.
- “Espera un momento, Son Goten.” – le detiene Roshi. – “Tengo algo para ti, dame un minuto”. – dice Roshi mientras se levanta.
- “¿Algo para mí?” – se extraña Goten.

El anciano se va hacia el armario y busca entre cajas polvorientas.

- “¡Aquí está!” – exclama el maestro. – “Temía que con los años se hubiera estropeado, pero parece que sigue en perfectas condiciones. Aquí tienes.” – dice entregándole una caja de cartón.
- “¿Qué es? Esto está lleno de polvo.” – dice mientras la abre. – “¿Un uniforme?”
- “Fue uno de los uniformes de tu padre” – le responde.
- “¡Oh!” – exclama Goten ilusionado. – “¿Me lo puedo probar?”

Mientras tanto, el planeta del Dios de la destrucción, Goku y Vegeta han empezado su entrenamiento y se encuentran meditando en absoluto silencio, mientras Whis les observa. 

Son Goku consigue estar en paz, pero Vegeta está algo intranquilo.

- “Vegeta, tienes que relajarte más. Así no conseguirás nada.” – le corrige Whis. – “Tenéis que mezclar vuestro ki con el ki divino. Tenéis que percibirlo y dejarlo fluir en vuestro interior.”

En el Planeta Sagrado de los Kaioshin, Piccolo, Shin, Kibito y el anciano Kaioshin, tras reunirse para realizar el reparto de sectores, ya han tomado una decisión.

- “Wakari se encargará del sector Sur” – anuncia Shin. – “Narai del sector Oeste. Y finalmente, Zamas tendrá a su cargo el sector Norte”.

En Satan City, Son Gohan y Videl se encargan de detener un robo, disfrazados de Great Saiyaman y Great Saiyaman 2.

- “Hacía tiempo que no teníamos que actuar.” – comenta Videl, mientras golpea a uno de los ladrones.
- “El crimen ha bajado mucho desde nuestra aparición. Aunque admito que...” – le interrumpe un disparo en su hombro, que sale rebotado. 

Gohan embiste al ladrón, golpeándole y lanzándolo contra la pared.

- “¡...sienta bien hacer ejercicio de vez en cuando!” – termina la frase Gohan.

En la Kame House, Goten realiza unos estiramientos al lado del mar, llevando el antiguo uniforme de Son Goku, con el símbolo de la escuela Tortuga en la espalda. 

Roshi le observa y no puede evitar recordar viejos tiempos, cuando Goku se puso ese uniforme por primera vez.

Dibujado por Torrijos

Son Goten, ilusionado por seguir los pasos de su padre y conocer más sobre él, no puede evitar imitarle.

- “Ka... me... ha... me...” – se prepara mirando hacia el mar. – “¡HAAAAA!”

El chico lanza un potente Kamehameha hacia el horizonte, levantando dos grandes olas a los lados y despejando el camino.

- “No está nada mal.” – le felicita Roshi.
- “Me lo enseñó mi hermano. Jeje.” – dice Goten, contento con el complido.
- “Conoces las bases de la técnica, aunque no la dominas a la perfección” – dice el maestro.
- “La hago como me enseñó él...” – se excusa Goten.
- “No lo dudo. Pero ni el propio Son Goku, quién mejor domina y ha adaptado esta técnica, la realiza como yo la creé.” – explica el Sabio Tortuga. – “La ha adaptado a un estilo de lucha más dinámico, mucho más útil para combates de esos niveles, pero no estaría de más que aprendieras la forma correcta o, mejor dicho, tradicional, de realizar mi técnica.” – continúa Mutenroshi. – “Observa.” – dice mientras clava el bastón en la arena y se quita la camisa. – “¡OooooOOOh!” – grita al aumentar su tamaño muscular.
- “¡¿Pero como ha hecho eso?!” – se sorprende Goten.
- “Eso no importa, fíjate en la técnica.” – le responde Mutenroshi.

El viejo Roshi realiza un potente Kamehameha, que cruza el mar, pero que no impresiona a Goten.

- “No me ha parecido más fuerte que el mío...” – dice algo decepcionado.
- “Juju... Definitivamente no lo era” – le da la razón Roshi, mientras se deshinchan sus músculos y vuelve a recuperar su aspecto natural – “Pero eso es porque los saiyajin tenéis una fuerza descomunal.”
- “¿Que quiere decir?” – le pregunta un desconcertado Goten.
- “Si realizas el Kamehameha de esta forma, su potencia será muchísimo mayor. Pero necesita cierto tiempo, y eso es una desventaja en combate. Por eso Son Goku tuvo que adaptarlo a sus necesidades.”

Después de días de sesiones de meditación, Goku empieza a tener buenos resultados, y un aura incolora y densa empieza a envolverle. Vegeta también ha progresado, pero su aura es mucho menor, algo que le frustra y le impide concentrarse correctamente.

- “¡Esto es ridículo!” – murmura Vegeta, que ha perdido la paciencia.

Whis se da cuenta y decide pasar al siguiente ejercicio. 

- “Es hora de que pongáis a prueba el control de este ki.” – dice Whis. – “Intentad mantenerlo mientras lucháis entre vosotros”.
- “Esto ya es más interesante” – sonríe Vegeta.

Ambos se preparan para el combate.

- “¿Listo, Vegeta?” – dice Goku.

Vegeta ataca directamente y empiezan a intercambiar golpes. Primero parece un combate parejo, pero de repente Vegeta pierde el control sobre su ki divino, y es superado fácilmente por Goku, que le golpea estrellándole contra el suelo.

- “¿Estás bien, Vegeta?” – se preocupa Goku.
- “Empiezo a entender la diferencia que existe entre vosotros...” – dice Whis.
- “¿Cómo dices?” – le dice Vegeta, ya de pie, en tono amenazante.
- “He dicho que ya veo porque nunca has alcanzado a Son Goku” – le espeta Whis.
- “¡Repite eso!” – le amenaza Vegeta enfadado, transformándose en Súper Saiyajin 2.
- “¡Tranquilízate, Vegeta!” – le dice Goku.
- “¡Cállate, Kakarotto!” – le responde tajante.
- “Son Goku, ve a comer algo, continuaremos en unos minutos.” – dice Whis, para quedarse a solas con Vegeta.
- “Está bien... pero no os peleéis...” – dice Goku alejándose. – “Relájate un poco, Vegeta”.

Vegeta vuelve a su estado base.

- “Son Goku tiene un mejor control del ki” – explica Whis. – “Ha pasado por una gran cantidad de maestros que han formado las bases desde la cuales ha crecido. Tú, en cambio, has aprendido en el campo de batalla.” – continua en ángel. – “No pongo en duda tu capacidad de superación.... Para no tener ninguna base, me sorprende lo lejos que has llegado”.
- “¡Estupideces!” – sentencia Vegeta, ofendido.
- “¿Crees que es casualidad que Son Goku siempre vaya un paso por delante?” – le pregunta Whis. – “Puedes volver a la Tierra si quieres. Nunca podrás controlar el ki divino si no eres capaz de dominar el tuyo propio”.
- “No pienso quedarme de brazos cruzados mientras Kakarotto sigue avanzando” – dice Vegeta.
- “Entonces puede que necesitemos ayuda...” – dice Whis con una sonrisa burlona.

domingo, 22 de octubre de 2017

DBSNL // Capítulo 12: Comienza el entrenamiento

DBSNL // Capítulo 12: Comienza el entrenamiento
“Nos vamos”


Shin, Kibito, el gran antepasado y los futuros Kaioshin acaban de regresar al Planeta Sagrado.

- “Bienvenidos a vuestro planeta” – les dice Shin. – “Como ya sabéis, desde aquí cuidamos nuestros respectivos sectores, que el Dai Kaioshin os asignará”. 

La desaprobación por parte de Zamas se hace evidente en su rostro.

- “¿Algo que decir?” – le llama la atención Kibito.

Pero antes de que Zamas pueda responder, les interrumpe el nuevo Dai Kaioshin.

- “Ya era hora” – dice el Dios.
- “Nos hemos entretenido un poco con nuestro antiguo maestro” – se disculpa Shin. – “Estos son los nuevos Kaioshin: Narai, Wakari y Zamas. ¿Qué opinas, Piccolo?"

Y es que Piccolo, por la insistencia de Whis y el apoyo de Shin, ha sido nombrado nuevo Dai Kaioshin por Beerus.

- “¿Un namekiano?” – se sorprenden los nuevos Kaioshin.
- “Piccolo, o mejor dicho, parte de él, fue el Kamisama de un pequeño planeta, la Tierra”.
- “Un Dios menor de un planeta insignificante... esto es ridículo” – murmura Zamas. – “Ni siquiera lleva la ropa sagrada”.

Piccolo, que sigue vistiendo con su típica ropa namekiana, le oye, con el gran oído propio de su raza, pero opta por no decir nada.

- “Shin, ¿de verdad que no quieres pasar al sector Norte?” – le pregunta Piccolo. – “Seguro que a Son Goku y los demás les gustaría que estuvieras a cargo de su sector”.
- “Me siento halagado, Piccolo” – le responde Shin. – “Pero creo que seguiré ocupándome del Este. Vuestro sector puede llegar a ser demasiado movido para mi gusto” – dice sonriendo. 
- “De acuerdo.” - responde Piccolo devolviéndole la sonrisa. - “Entonces quedan el sector Norte, Sur y Oeste.”

Mientras tanto, Whis ha regresado a la Tierra en busca de Goku y Vegeta, a quienes pretende llevar al planeta del Dios de la destrucción, para entrenarles y ayudarles a alcanzar y dominar ese nuevo espectro de ki que llaman divino.

- “¡Esperad!” – les grita Bulma antes de que se vayan, mientras corre hacia ellos. – “Os he preparado esto” – dice entregándole una cápsula a Vegeta y otra a Goku.
- “¿Qué es?” – pregunta Goku.
- “Unos uniformes nuevos” – explica Bulma. – “Están hechos de una tela más ligera y resistente, seguro que os serán muy útiles en vuestro nuevo entrenamiento”.
- “¡Muchas gracias!” – dice Goku ilusionado.

Vegeta sigue poniendo mala cara y recibe el regalo con indiferencia.

- “Vegeta…” – le llama la atención Bulma agarrándole del brazo. 

Vegeta mira a Bulma, que simplemente le sonríe, y éste le devuelve una tímida sonrisa que, aunque forzada, muestra la complicidad que existe entre ambos.

- “Nos vamos” – dice Whis.

Goku y Vegeta tocan la espalda del ángel, y Vegeta le hace un ligero gesto de despedida a su esposa, justo antes de ser teletransportados.

Horas después, en la Kame House, Goten y Trunks han terminado su día de entrenamiento y se encuentran agotados.

- “Habéis hecho un buen trabajo” – les felicita el maestro Roshi. – “Os espero mañana a la misma hora”.
- “Esto es una locura. No podemos hacer esto cada día” – se queja Goten. – “Y no creo que mi madre me deje venir siempre...”.
- “¡Oh, no!” – se alarma Trunks. – “Tenía que ir a comprar parte de la cena. Mi madre me va a matar.”
- “Yo no puedo ni moverme...” – dice Goten.
- “Tengo que irme o cerrarán la tienda” – continúa Trunks, transformándose en Súper Saiyajin. – “¡Gracias por el entrenamiento, maestro Roshi! Volveré mañana si puedo.” – dice antes de salir a toda velocidad hacia la Capital. – “¡Adiós!”
- “¡Espérame, Trunks!” – le grita Goten, que intenta transformarse en Súper Saiyajin, pero no lo consigue. – “Tengo demasiada hambre...” – dice llevándose la mano al estómago, mientras le rugen las tripas.
- “Definitivamente es hijo de Son Goku...” – murmura Roshi sonriendo.



domingo, 15 de octubre de 2017

DBSNL // Capítulo 11: Hijos de los Dioses

DBSNL // Capítulo 11: Hijos de los Dioses
“Creo que cometen un grave error.”


El maestro Roshi y los chicos han viajado hasta una isla cercana donde pueden empezar su entrenamiento.

- “Creo que el entrenamiento que hicieron Goku y Krilin no servirá, ya que realmente estáis a otro nivel...” – dice Roshi pensativo, mientras los niños le escuchan orgullosos de su poder. – “Vamos a tener que improvisar algo…”.
- “Esto va a ser muy fácil” – le susurra Trunks a Goten.
- “Venid conmigo” – dice el anciano.

Los tres se dirigen al puerto, donde una considerable cantidad de gente está embarcando en un barco de crucero.

- “¡Buenos días!” – saluda Roshi al guardia del puerto.
- “¡Buenos días!” – responde éste. – “¿En que puedo ayudarle?”.
- “Verá, estos chicos necesitan hacer ejercicio y pensé que podrían serles de ayuda aquí en el puerto…”
- “¡Por supuesto! Aquí siempre hay trabajo que hacer.” – responde el guardia. – “Podrían ayudar a cargar el equipaje al barco”.

Goten y Trunks se miran y sonríen con complicidad.

- “Te lo dije” – susurra Trunks. – “Esto va a ser pan comido”.

Roshi sonríe pícaramente.

- “Yo tenía otra cosa en mente...”

En el planeta Ira-iru, los Kaioshin ya han elegido entre los candidatos. 

- “Sin duda, estos son los mejores” – dice el anciano.
- “Eso parece”. – responde Shin. – “Tienen todas las características fundamentales para ser buenos Kaioshin. Sabios y serenos.”

El Ro-Kaioshin no deja de mirar a Zamas con cierto recelo.

- “Sin duda son extraordinarios” – dice el anciando Kaioshin.
- “Pero han elegido solo a tres” – señala el anciano de la academia. – “Imagino que usted se convertirá en Dai Kaioshin. ¿No necesitará a cuatro para ocupar los puestos cardinales?”
- “Ya tenemos un Dai Kaioshin” – responde Shin con una sonrisa.
- “¿Cómo?” – se sorprende el anciano. – “¿Acaso ocupará usted ese lugar?” – le pregunta al gran antepasado.
- “Jeje. Claro que no.” – responde éste. – “Mi tiempo ha pasado”.
- “¿Entonces? No lo entiendo.” – dice el Maestro Toshisei.
- “Es alguien que vive en la Galaxia del Norte” – aclara Shin.

El anciano se siente ofendido, ya que lo toma como un desprecio a la Academia, pero intenta mantener el respeto hacia los Kaioshin.

- “¿Alguien externo a la Academia?" – interrumpe Zamas. - "Creo que cometen un grave error. Dudo que nadie fuera de este planeta esté preparado para...”
- “Esa decisión no te pertenece” – le reprende Kibito, serio.
- “Lo siento." – se disculpa Zamas. - "Pero es que...” 
- “¡Zamas!” – le llama la atención el anciano. – “Muestra respeto. Es la decisión que han tomado. Aunque yo también creo que se equivocan...”.

En la Tierra, Goten y Trunks se colocan unos arneses, enganchados a dos enormes cadenas que van hasta la proa del crucero. 

- “¿Y está usted seguro de esto? – le pregunta el guardia del puerto al maestro Roshi.
- “Por supuesto. ¡Y no contaminan!” – bromeando el viejo maestro.
- “Esto es una locura.” – se queja Trunks. 
- “Y recordad: Nada de volar y nada de Super Saiyajin.” – les repite Roshi. – “Tenéis que llevarles hasta la Isla Papaya a nado y después traerles de vuelta”.
- “¡Pero si está a cientos de millas!” – se lamenta Goten. 
- “Entonces tendréis que daros prisa, porque el siguiente barco sale ésta misma noche…” - añade su maestro.
- “¿!QUÉ!? – dicen los dos niños atónitos al unísono.
- “Este tipo está loco...” – añade Trunks.

domingo, 8 de octubre de 2017

DBSNL // Capítulo 10: Viejos maestros, nuevos alumnos

DBSNL // Capítulo 10: Viejos maestros, nuevos alumnos
“¿Ellos?”


Van pasando los meses y nuestros amigos vuelven a disfrutar de la paz en la Tierra.

Krilín y la número 18 se han adaptado a los tiempos de calma y ambos han abandonado la lucha. Están de compras en la ciudad. La 18 parece algo inquieta.

- “Te preocupas demasiado” – le dice Krilín.
- “No me gusta dejarla sola” – replica ella.
- “No está sola. La hemos dejado con un buen canguro” – la tranquiliza Krilín.

En su casa, Yamcha se encuentra llamando por teléfono a uno de sus ligues, mientras la pequeña Marron hace desastres en la cocina y se escucha un estruendo de platos rotos.

Lejos de allí, en un paisaje helado, durante una terrible ventisca, Ten Shin Han y Chaoz avanzan arrastrando un enorme bloque de hielo como forma de entrenamiento. Ambos avanzan lentamente hacia una pequeña casa a lo lejos donde Lunch, con su melena azul recogida con un pañuelo, les espera preparando una sopa.

- “Lo mejor para este frío es una buena sopa caliente” – murmura con tono alegre.

De repente la pimienta que usaba para condimentar la comida la hace estornudar y el pañuelo que llevaba en la cabeza se deshace, dejando libre su cabellera rubia. Su mirada cambia a una enfadada y más terrorífica que la del propio Dios de la destrucción. 

De una patada abre la puerta y sale al frío exterior, ametralladora en mano.

- “¡Daos prisa, panda de vagos! ¡Si no llegáis en 30 segundos os quedaréis sin cena!” – dice disparando una ráfaga continua al cielo.

Ten Shin Han y Chaoz se miran con miedo y empiezan a correr hacia la casa, arrastrando el enorme bloque a una velocidad a la que no se creían capaces.

En la Kame House, Mutenroshi duerme la siesta en el sofá, con una revista erótica a su lado, cuando alguien le llama desde el exterior.

- “¡Duende tortuga!” – dice la voz. – “Duende tortuga, ¿está ahí?”

Mutenroshi se despierta algo exaltado, cayéndose del sofá, pero se levanta y abre la puerta.

- “¡Son Goku! ¿Qué haces tú aquí?” – pregunta sorprendido al reconocer la agradable visita.
- “Le traigo a dos nuevos alumnos” – dice Goku, mostrándole a sus dos acompañantes.
- “¿Ellos?” – se sorprende Roshi al ver a Son Goten y Trunks.



Dibujado por El Discípulo de Tori


- “Sí. Ellos son realmente fuertes, pero les falta el entrenamiento básico.” – explica Son Goku.
- “Ya veo... ¿y Vegeta está de acuerdo?” – pregunta Roshi.
- “Jeje... Esto... No le hemos preguntado...” – dice Goku, sabiendo que el padre de Trunks despreciaría tal entrenamiento. – “Tampoco sabe nada Chichi”.
- “Supongo que es mejor así... Temo más a tu esposa que a Vegeta” – le confiesa Mutenroshi.

En el planeta Iru-aru:

- “Aquí están los candidatos.” – dice el maestro Toshisei. – “Son los mejores de la Academia. Algunos llevan esperando desde la primera aparición de Majin Bu.”
- “Estamos encantados de optar a tal honor, sus excelencias.” – interrumpe uno de ellos, acercándose al grupo de Kaioshin y haciendo una gran reverencia.
- “¡Oh! Y éste es el número uno. Es realmente un prodigio y lleva preparándose durante milenios.” – dice el anciano, presentando a su alumno estrella. – “Os presento a Zamas”.

domingo, 1 de octubre de 2017

DBSNL // Capítulo 9: Restableciendo el orden

DBSNL // Capítulo 9: Restableciendo el orden
“¿Madas?”


Nuestros amigos, después de su enfrentamiento con el Dios de la destrucción, el señor Beerus, disfrutan de su merecido descanso.

En el planeta de los Kaioshin, Shin, Kibito y el gran antepasado, por orden de Beerus, planean restablecer el sistema de los Kaioshin cardinales, que ha permanecido en mal funcionamiento desde la primera aparición de Majin Bu.

- “Nombrar a tres Kaioshin...” – dice el anciano. – “Esto no va a ser fácil”.
- “Nunca pensé que esta responsabilidad caería sobre mí” – se lamenta Shin.
- “Varios aspirantes han seguido preparándose esperando su oportunidad, como hizo usted” – dice Kibito.
- “Lo sé, Kibito” – le responde Shin. – “Pero elegir a los idóneos no será tarea fácil”. 

En la mansión Satán, Mr. Bu y Mr. Satán toman el Sol en la piscina, mientras en la casa de invitados Son Gohan y Videl repasan la lección, mostrando gestos de cariño y complicidad entre ambos.

En el Monte Paoz, Son Goten y Trunks, que ha venido de visita, entrenan en los alrededores de la casa, mientras Chichi les prepara la comida. Son Goku les corrige los errores, sentado en el suelo, con cara de aburrido.

Vegeta se encuentra en el balcón de la Corporación Cápsula, recién duchado después de una sesión de entrenamiento, mirando al horizonte, pensando en su derrota contra Beerus, y sobre el combate de Goku y el Dios. Vegeta sabe que necesita entrenar más que Goku si no quiere seguir permaneciendo atrás.

Bulma sale al balcón, y ve cabizbajo a su marido.

- “¡Aquí tienes!” – dice lanzándole una lata de refresco.

Vegeta la caza al vuelo, pero sigue mirando al infinito, perdido en sus pensamientos.

- “¿Qué ocurre?” – le pregunta Bulma, algo preocupada.
- “Nada”. – responde tajante Vegeta, intentando evitar la conversación, mientras estruja la lata en su mano.

En un planeta para nosotros desconocido, acaban de llegar los Kaioshin. Aparecen en una enorme ciudad, cuya arquitectura recuerda a las antiguas civilizaciones de Roma y Grecia, pero mucho más avanzada.

Esta ciudad está repleta de personajes semejantes a los Kaioshin, que detienen su camino cuando aparecen éstos.

- “Os esperábamos” – dice una voz ronca.

Al darse la vuelta, Shin puede ver a un ser muy anciano, apoyado en su bastón.

Dibujado por Ipocrito


- “¡Maestro Toshisei!” – se alegra Shin. - “¡Cuanto tiempo sin verle!”
- “Llevamos años esperando vuestro regreso a Ira-iru...” – continúa el anciano. – “Cuando nos enteramos de lo sucedido con Majin Bu, esperábamos que volvierais para reclutar a nuevos Kaioshin, pero no vinisteis.”
- “Lo siento, señor” – se disculpa Shin. – “No fui capaz de tomar esa iniciativa. Después de perder al Dai Kaioshin...”
- “No tienes que disculparte” – le interrumpe el anciano. – “Lo importante es que estáis aquí y...” – de repente deja de hablar y se fija en alguien que parece reconocer. “¿Madas?”
- “Pensé que no me reconocería... Jeje.” – sonríe el anciano Kaioshin.
- “¿Cómo voy a olvidarme del Kaioshin más sinvergüenza que ha salido de la academia?” – dice burlonamente el anciano.– “Puedo verte incluso a través de esa unión Pothala”.

En la Corporación Cápsula, Vegeta y Bulma están en su habitación, tras un día largo para ambos, por razones muy distintas.

- “¿Ya estás más relajado, mi príncipe?” – dice Bulma abrazando a Vegeta.

Éste no responde y sigue inmóvil mirando al techo.

- “Siempre lo mismo...” – continúa Bulma. – “Tienes que dejar de competir con Son Goku”.
- “No es tan sencillo” – responde Vegeta. – “Haga lo que haga, él siempre va un paso por delante”. 
- “No puedes vivir así” – le dice Bulma, besándole la mejilla. – “Hay cosas más importantes”.

Vegeta mira hacia otro lado al sentirse incomprendido.

Bulma se incorpora en la cama.

- “Vegeta, tengo que decirte algo...” – le dice Bulma. – “Estoy embarazada.”