Emperador Freezer / Parte VI: Planeta de metal
“Has cometido un error viniendo aquí”
La nave de Freezer, tras varias semanas de viaje, se aproxima al planeta M2, que parece una gran masa metálica resplandeciente.
- “Llegaremos en unos minutos, señor” – anuncia uno de sus hombres.
- “Excelente” – celebra el tirano.
Al acercarse más a la superficie, un soldado irrumpe de nuevo en la cámara del Emperador con un nuevo anuncio.
- “Señor, según nuestros sensores, el planeta no tiene atmósfera” – dice el soldado.
- “No será un problema” – responde el demonio del frío. – “Detened la nave y preparad la escotilla superior. Saldré solo.”
Freezer abandona su nave y desciende hasta la superficie del planeta.
- “Un desierto de metal…” – murmura el tirano al echar un vistazo a su alrededor. – “Que extraño…” – dice algo inquieto. – “Siento un ki muy tenue en esa dirección…”
El tirano sale volando en busca de ese misterioso indicio de vida.
Mientras tanto, en la nave, Tagoma está al mando. Él supervisa las lecturas que la nave toma continuamente del planeta.
- “El señor Freezer está volando hacia el Este” – anuncia un soldado.
- “¿Alguna lectura relevante en esa dirección?” – pregunta Tagoma.
- “De momento no hay rastro de vida en el planeta, pero la corteza metálica podría causar interferencias.” – responde otro de sus hombres.
Freezer, tras unos minutos de vuelo, se topa con una gigantesca metrópolis, en cuyo epicentro se encuentra un gran edifico piramidal.
De repente, un pequeño robot se acerca al tirano. El autómata es de color blanco y forma redondeada, con un gran ojo central.
- “¡Alerta: Intruso! ¡Alerta: Intruso!” – repite el robot.
Freezer observa detenidamente a esos seres.
- “He venido a buscar información” – anuncia el tirano.
- “Forma de vida biológica detectada” – dice el autómata. – “Acceso no permitido.”
- “Jujuju” – ríe Freezer. – “Eso ya lo veremos”.
El tirano alza su mano y apunta con su dedo al robot.
- “¡ALERTA: PELIGRO! ¡ALERTA: PELIGRO!” – repite el pequeño autómata.
Freezer dispara y el robot estalla en mil pedazos.
El tirano sonríe satisfecho.
Unos segundos después, un zumbido creciente alerta a Freezer.
El tirano mira al suelo y se percata de que un enjambre de cientos de robots se aproxima a él a gran velocidad. Los autómatas tienen un aspecto similar al destruido, pero de color morado y con una larga cola naranja.
Freezer se eleva, perseguido por la turba.
El demonio del frío apunta a la multitud y dispara su Rayo Mortal a discreción, destruyendo decenas con cada ataque. Pero pronto se da cuenta de que más y más robots se unen a la batalla.
Tagoma, en la nave, puede ver las explosiones en el monitor.
- “¿¡Están atacando al señor Freezer!?” – pregunta alarmado.
El tirano se detiene en el cielo y se envuelve por una barrera esférica de energía morada y se lanza en picado contra el enjambre, causando cientos de explosiones a su paso, arrasando con todos los robots que encuentra en su camino, hasta que finalmente choca contra la superficie del planeta.
El demonio del frío mira de nuevo a su alrededor mientras aún lluven trozos de metal.
- “Chatarra…” – murmura con desprecio.
Pero pronto se da cuenta de que nuevos robos le rodean.
- “Se me acaba la paciencia…” – amenaza el tirano.
En ese instante, los autómatas se detienen.
- “¿Os rendís?” – fanfarronea Freezer.
Cuatro nuevos robots aterrizan y rodean al demonio.
- “¿Refuerzos?” – sonríe el Emperador.
Uno de los robots es humanoide, de color rojo, alto y estilizado. El segundo es grande, también antropomórfico, metálico y con detalles púrpuras. El tercero, tiene una estatura similar a Freezer, pero sin cabeza. Y el último es antropoide, pequeño y rechoncho, con partes de color verde.
En la cima de la torre central, otro autómata humanoide de tez azul y detalles dorados observa las cámaras de seguridad, repartidas por todo el planeta.
- “El Emperador Freezer… ¿Qué le trae por aquí?” – dice mientras le observa atentamente. – “Veamos de qué es capaz contra el Escuadrón Sigma”.
El gigantón robótico intenta golpear al tirano por su derecha, pero éste detiene el golpe fácilmente. El azul insiste por su izquierda, pero Freezer también le detiene. El más pequeño de ellos ataca al demonio por la espalda, pero con un golpe de su cola, el tirano lo despacha. En ese instante, el robot rojo intenta sorprender a Freezer atacándole de frente rápidamente, pero el demonio le detiene con un cañonazo de ki proyectado con sus ojos.
Freezer utiliza su poder mental para elevar al robot azul y lanzarlo contra el morado.
El pequeño robot verde vuelve a atacar al demonio, pero lo intercepta con su poder mental y lo estruja hasta convertirlo en una bola de chatarra.
El autómata rojo se eleva y dispara una tormenta de misiles contra Freezer, pero éste usa de nuevo su telekinesis para interponer al robot grandullón en el camino de éstos, haciendo que estalle en mil pedazos.
El robot azul carga de nuevo contra el tirano, pero éste moviliza los residuos metálicos esparcidos por el lugar y los lanza contra su enemigo como si fueran metralla, triturándolo.
El robot rojo embiste a Freezer, pero él alza su mano haciendo que el suelo estalle bajo el enemigo.
El autómata intenta localizar al tirano entre la polvareda, pero un disco cortante aparece por sorpresa. El robot logra evitarlo saltando, pero Freezer le espera en las alturas y le golpea con su cola, haciendo que el robot vuelva al suelo, donde un segundo disco lo rebana por la mitad.
La polvareda se disipa en unos instantes y Freezer desciende. La parte superior del robot rojo intenta gatear hasta el demonio del frío.
- “No sois más que chatarra” – murmura el tirano con desprecio antes de eliminar a su enemigo con un ataque de ki.
En la nave, Tagoma sigue pendiente de lo que sucede.
- “¡Lecturas!” – ordena a sus hombres.
- “El señor Freezer parece que sigue en perfecto estado” – responde un soldado. - “No vemos nada más.”
Tagoma se acerca al gigantesco ojo de buey y contempla el horizonte, que resplandece por el reflejo de la luz procedente de una estrella cercana.
- “No me gusta este planeta” – murmura el soldado.
Freezer da la espalda a los restos de sus enemigos y se prepara para marcharse, pero un ruido llama su atención.
Unos extraños cables a modo de tentáculos se alzan desde el suelo metálico y se entrelazan entre sí, recogiendo los restos robóticos de sus enemigos caídos y reconectándolos.
- “Pero, ¿qué demonios es esto?” – se sorprende el de el demonio.
En un instante, los cuatro robots se han reconstruido.
- “Nunca había visto algo así…” – piensa Freezer.
Los autómatas se abalanzan sobre el Emperador, pero éste alza una poderosa corriente de aire con un gesto de su mano que barre y destruye de nuevo a sus enemigos.
Pero, en un instante, ellos vuelven a reconstruirse.
- “No pienso aguantar esto todo el día” – refunfuña el tirano.
De repente, una voz interrumpe el combate.
- “No puedes ganar, Freezer” – dice el personaje que antes vigilaba desde la torre y ahora ha decidido mostrarse.
El Emperador le mira con interés.
- “Me has reconocido” – sonríe el tirano. – “¿Tú eres quien manda aquí?”
- “¿Por qué has venido?” – pregunta el nuevo autómata.
- “Busco unas cajas de música robadas” – responde Freezer.
- “¿Y porqué aquí?” – insiste el robot.
- “El golpe solo puedo hacerse utilizando una tecnología incomprensible incluso para mis hombres, entre los que se encuentran los mejores especialistas del Universo” – responde el tirano.
- “¿Para qué querríamos unas cajas de música?” – pregunta el robot.
- “Eso aún no lo sé, chatarra” – dice Freezer.
- “Puedes llamarme Rildo” – responde el autómata.
- “¿Por qué debería poner nombre a un saco de tornillos?” – se mofa el tirano.
Rildo no reacciona ante las burlas.
- “Has cometido un error viniendo aquí” – le advierte el robot.
- “Dame la información que necesito” – insiste Freezer.
- “Estás buscando en el lugar equivocado” – responde Rildo.
- “¿Y dónde debería buscar?” – insiste el demonio del frío.
- “Ya no importa” – sonríe el robot. – “Porque no vas a abandonar este planeta”.
Rildo apunta al tirano con su mano y ésta se deforma revelando un cañón que dispara un poderoso ataque de ki que sorprende a Freezer, obligándole a protegerse.
Una gigantesca explosión barre el lugar. El autómata escanea la nube de humo y en busca de signos vitales.
De pronto, aparece una señal de alerta en el radar de Rildo. Freezer surge de la polvareda y se abalanza sobre su rival, propinándole un puñetazo y lanzándole contra unos edificios cercanos.
- “Tu ataque ha sido extraordinario” – dice el tirano. – “Me has cogido desprevenido. No he podido detectar tu energía. Pero eso no volverá a ocurrir” – añade mientras se eleva en el aire.
Rildo se pone en pie, pero se encuentra con una poderosa Bola Mortal aproximándose a gran velocidad.
El ataque del tirano impacta contra el enemigo y un gran estallido engulle parte de la ciudad.
Freezer desciende y se percata de que los robots que le rodeaban han dejado de funcionar.
- “Qué extraño…” – murmura el tirano. – “Supongo que él controlaba los autómatas de este planeta.”
En ese instante, una montaña de metal, que ahora se comporta como un líquido viscoso, se alza detrás de Freezer.
El tirano se da la vuelta y contempla el extraño fenómeno.
En lo alto de la montaña, una figura humanoide musculosa y brillante surge de su cima y se separa de ésta.
- “Yo soy el planeta” – sonríe Rildo, que ha tomado una nueva forma.
Interesante...ya me estaba haciendo la idea, de que nos mostrarías el origen de Nigrissi, pero como va la cosa... nos da para uno o dos caps. Xd
ResponderEliminarHablaremos de Nigrissi en su momento. En el torneo participaba para el U1.
EliminarSí, esta “saga” del Especial dará para unos pocos capítulos :)
Si, pero tambien debio haber, existido un M2 en el U1 :^)
EliminarVeremos muchas cosas en los próximos especiales. No puedo decir más :)
EliminarHiper rildo al ataque!! Que poder se supone que tiene este rildo? sabemos que en GT todo era incoherencia xD
ResponderEliminarLo sabremos en el próximo capítulo ;)
EliminarHas matado a Giru, pobrecillo, fue de lo mejor de Dragon Ball GT jajaja.
ResponderEliminarMe encantan estos especiales, son en los que más te estás luciendo en como adaptas cosas de GT al canon de tu obra dándole sentido e imaginación, muy bueno tio.
XD No pude evitar la referencia.
Eliminar¡Muchas gracias!
La verdad me gusta que incluyas al Escuadrón Sigma y a Rildo en la historia, es como una segunda oportunidad para ellos ya que en GT apenas pudieron hacer algo.
ResponderEliminar¡Gracias!
EliminarHan existido en todos los Universos, así que puede que tengan varias oportunidades más XD
Bueno, aquí no podrán aprovecharla mucho porque Freezer se los va a cepillar, pero eso está bien.
EliminarPodrias, al menos, de forma relativa, dar el nivel de Freezer aqui y el de rildo antes de hacerse metal líquido?
ResponderEliminarGran especial
¡Gracias!
EliminarPor su enfrentamiento con Turles y sus interacciones con Cooler sabemos que Freezer considerablemente más fuerte que en Namek y que en su regreso a la Tierra. Además, es inmortal.
Sobre Rildo, es difícil, porque él es M2. Es distinto a GT. Se parece más a Ego, de Guardianes de la galaxia.
Veremos más en el próximo capítulo ;)
Hay forma de matar a alguien inmortal? El Hakai puede eliminarlos? La verdad es que fue sorprendente saber que era inmortal y lo que paso con Cooler fue excelso, pero a veces siento que la inmortalidad pronto aburre ya que puedes desintegrarlo y volvera a su estado normal y mas siendo él el protagonista, siendo el enemigo la inmortalidad le da algo de interes, aunque bueno, falta ver como se deshace de lo demas.
ResponderEliminarMe han gustado las referencias aunque sie to un poco flojo este cap, supongo que el que sigue sera mejor, ya que Rildo debe ser una bestia ahora.
Ya vimos a Zeno borrar a un Freezer en la Tierra. Ya sabemos el destino de estos dos Freezer (3 y 5). Esta historia solo nos narra sus aventuras desde que perdió en la Tierra hasta que se convietió en Hakaishin.
EliminarTambién sabemos que para regenerarse tiene que morir, porque lo averiguó Vegeta en su combate en el U7.
La inmortalidad no es perfecta.
Ah, es verdad, el Hakaishin de trunks del futuro, olvidaba ese pequeño detalle, a seguir viendo como va todo.
EliminarBatosai, tengo una pregunta. Si la historia de DBSNL sigue tras el torneo del poder ¿No podrías hacer algo para que vuelva Raditz? Siempre me pareció un personaje infravalorado y que podría agregar mucho a la historia. Sería interesante que, por ejemplo, las noticias del Torneo del Poder lleguen hasta el infierno y Raditz haya recapacitado tras mucho tiempo, y le haya herido el orgullo ver los logros de su hermano cuando él murió habiendo sido un guerrero de clase baja. Y Raditz que llegue al menos hasta el Ssj2 tendría mucho que aportar a la historia, como ver a alguien adaptándose a un nuevo tipo de vida tras tanto tiempo en el infierno, aparte de que pueda contarle a Goku y a sus hijos sobre sus padres y sus propios conceptos sobre la raza Saiyajin.
ResponderEliminarPuede que lo mío sea por ser muy fanboy de Raditz, pero considero que nunca lo aprovecharon realmente bien, es decir... es el hermano mayor de Goku y tienen un pasado conflictivo por lo acontecido al inicio de la saga Saiyajin, pero Goten no vivió eso y posiblemente no se lo contaron.
Sea como sea, te felicito por las historias que estás creando en este blog, son muy buenas y tienen un desarrollo interesante, además de que el relato tiene la curiosa característica de que está todo escrito y las ilustraciones no son totalmente importantes.
¡Muchas gracias!
EliminarLa verdad es que me gustaría hacer algo con él, pero es más probable que le veamos en un Especial.
Entonces, si Cooler en el Universo 7 toma el poder de M2, podría usar al Escuadrón Sigma como soldados? XD
ResponderEliminarPosiblemente podría reconstruirse un Escuadrón Sigma.
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